Ha llegado el verano y lo ha hecho con la primera ola de calor importante en nuestro país. Una ola que prevé que se alcancen temperaturas muy altas en toda la Península Ibérica y que ya está llegando a nuestra zona de distribución energética. Por ello, os proponemos aquí unos consejos para consumir la energía necesaria:
Tamaño y potencia del ventilador o aire acondicionado: El tamaño y potencia del aparato que vayamos a utilizar para refrigerar la habitación ha de adaptarse al tamaño de la estancia. Además, hay que apostar por aparatos eficientes.
Ubicación: La parte exterior del aparato ha de ubicarse en una zona poco calurosa y a ser posible en sombra, así el aire estará más fresco y menos tendrá que trabajar el equipo.
Compartir espacios: Dividir espacios en una vivienda puede suponer un ahorro energético. Es mejor cerrar las puertas de las habitaciones que no vamos a usar.
Temperatura: Se recomienda no bajar de 22ª los aparatos, ya que una temperatura más fría supone que consuma más energía.
Tiempos: Se recomienda encender el aire acondicionado en los momentos en los que el calor es más fuerte y cuando hay gente en la vivienda. Estos aparatos no tardan mucho en llegar a la temperatura adecuada, por lo que no tiene sentido encenderlo horas antes de llegar a casa.
Ventanas y ventilación: En las horas centrales del día, lo mejor es tener aislada la vivienda y bajadas las persianas, para evitar que entre el calor. Es mejor ventilar la vivienda a horas más frescas.
Evitar emisores de calor: Algunos aparatos eléctricos que tenemos en casa pueden emitir calor, por lo que la estancia aumentará la temperatura. Es mejor apagar o reducir el consumo de estos aparatos, como por ejemplo, el horno o la plancha.